¿Un fin de semana sin salir de fiesta o de bares? ¡Suena perfecto! El momento ideal para permitir que tu cuerpo y tu cabello se reparen y para recargar tu mente. ¿Te gustaría volver al trabajo el lunes y que tus compañeros te pregunten si te has cortado el pelo y te digan que estás estupenda? Ve a por ello: comprueba si tiene estos ingredientes en casa y comienza tu fin de semana de spa de belleza y relajación.

1. DIY: mascarilla casera de aguacate y plátano

Esta mascarilla capilar fácil de hacer tiene un funcionamiento genial. Puedes aplicártela tanto en el cabello como en el cuero cabelludo.

Hay dos maneras de hacerlo:

• Añade tu aceite natural favorito a los ingredientes.
• Échate la mascarilla sin el aceite y dejarla reposar durante 20-40 minutos, pero luego aplícate un tratamiento de aceite para el cabello el mismo día y deja que actúe toda la noche o háztelo al día siguiente.

La mascarilla de aguacate refuerza brillantemente el cabello y regenera el cuero cabelludo, hidrata, aumenta el brillo y eleva las raíces del cabello, aumentando el volumen.

Receta de la mascarilla capilar

• medio plátano,
• medio aguacate,
• media cucharadita de aceite natural (argán, macadamia, jojoba, etc.),
• 1 cucharada de yogur natural.

Mezcla bien los ingredientes (aplasta la fruta para obtener una pulpa suave). Aplica la mascarilla y déjala reposar durante unos 20-40 minutos (dependiendo del tiempo del que dispongas), enjuágate y lávate el cabello.

2. Mascarilla facial casera reparadora y relajante

Nutrir la piel es otro elemento clave del fin de semana de spa en casa. El tratamiento te nutrirá el rostro, restaurará su agradable tono, reafirmará la piel y eliminará el cansancio.

Puedes cambiar ligeramente la forma en que funciona la mascarilla y adaptarla a tu tipo de piel utilizando aceites naturales. Intenta añadir aceite de argán o aceite de jojoba antienvejecimiento que calma y controla el sebo. se recomienda añadir jugo de áloe en la receta principalmente para pieles problemáticas, así que no dudes en saltártelo o elegir agua de rosas, por ejemplo.

Receta para el tratamiento facial

• medio plátano
• 1 cucharada de cacao
• media cucharadita de jugo de áloe o agua de rosas
• unas gotas de aceite de jojoba o de argán

Mezcla los componentes hasta que se conviertan en una masa suave. Ponte la mascarilla en la cara y enjuágatela después de 15 minutos con agua tibia. Usa tu tónico favorito o agua de rosas, y ponte una crema hidratante.

3. Tiras DIY para limpiar los poros de la piel

En lugar de comprar tiras de carbón vegetal en una tienda, hazte tú misma un producto igual de efectivo para purificar los poros de la piel y los puntos negros. Antes de ponértelos, es una buena idea tratar la piel con vapor facial para abrir eficazmente los poros.

¿Cómo se hace el vapor facial? Echa una cuchara de manzanilla en agua hirviendo en un recipiente, inclina la cabeza sobre el recipiente y ponte una toalla tapándote. La toalla evita que el vapor se escape y crea el ambiente necesario, como una sala de vapor, para que los poros de la piel se abran. Una vez que la piel esté preparada para los siguientes pasos, es el momento de ponerte las tiras de carbón casero, que son tan fáciles de hacer como el vapor facial.

Bate un huevo y extiéndelo sobre las zonas de la piel cubiertas por espinillas (nariz, barbilla, frente…). A continuación, cúbrelo con pañuelos de papel o papel higiénico (remójalos en agua unas dos horas antes de hacer el tratamiento, apriételos ligeramente y deja que se empapen). También es una buena idea cortarlos con antelación para que tengan el tamaño adecuado para las partes de la cara que vas a limpiar.

4. Baño de pies DIY

Siempre es una buena idea cuidarte los pies. Siempre que tengas algo de tiempo libre, trátalos para que se relajen y no te causen dolor o preocupaciones durante la semana. Un baño es una combinación perfecta de relajación y cuidado de la piel.

Receta para un baño de pies

Diluye 5 o 6 cucharadas de bicarbonato sódico en un cuenco. Enriquécelo con 2 o 3 cucharadas de un aceite natural y unas gotas de aceite esencial de menta o eucalipto. El bicarbonato sódico ayuda a suavizar la piel dura y todas las raspaduras de los talones. También es un agente desinfectante asombroso; los baños diarios con bicarbonato sódico reducen muy bien el problema de los pies excesivamente sudorosos.